Plasencia es una ciudad y municipio español de la provincia de Cáceres, situado en el norte de la comunidad autónoma de Extremadura. El municipio, que no forma mancomunidad con los pueblos que le rodean, limita con poblaciones de cinco mancomunidades: Alagón, Granadilla, Jerte, Riberos del Tajo y La Vera. Físicamente, la ciudad se halla en la puerta de entrada al Valle del Jerte, a pesar de que oficialmente no pertenece al mismo.
El término municipal de Plasencia tiene una extensión de 217,94 km² y en el mismo se ubican tanto la ciudad de Plasencia como las entidades locales menores de San Gil y Pradochano.8 Según los datos oficiales del INE de 2014, el municipio tiene 40 892 habitantes, de forma que es el segundo municipio más poblado de la provincia y el cuarto de la comunidad autónoma. La ciudad es sede episcopal de su propia diócesis y capital del partido judicial nº4 de la provincia. Al ser la ciudad más poblada del norte de Extremadura, acoge diversos servicios del Estado y de la Junta tanto para la población que alberga como para la de un gran número de municipios vecinos.
Fue fundada como ciudad por el rey Alfonso VIII de Castilla en 1186. Su establecimiento en el lugar se debía a razones de estrategia militar propias de la Reconquista, pues a escasos kilómetros de la ciudad se hallaban las fronteras castellanas con el reino de León al oeste y con los musulmanes al sur. La frontera con los leoneses estaba marcada en esta zona por la vía de la Plata, una importante calzada romana que hoy se usa como ruta de senderismo. Hasta el siglo XIX, fue la capital del sexmo de Plasencia, comunidad que llegó a abarcar la cuarta parte del territorio de la actual provincia. Pese a no haber tenido más de veinte mil habitantes hasta el censo de 1960, en la ciudad han ocurrido acontecimientos importantes como la boda de Juana la Beltraneja en la Guerra de Sucesión Castellana y la iniciativa de compra del voto en Cortes que dio lugar a la creación de la provincia de Extremadura en 1653.
La economía del municipio se basa principalmente en el sector servicios, pues en la ciudad hay más de mil establecimientos comerciales. Es importante el turismo, pues su conjunto histórico está declarado bien de interés cultural y la ciudad cuenta con dos festividades declaradas de interés turístico: el Martes Mayor y la Semana Santa. La ciudad posee un campus universitario dependiente de la Universidad de Extremadura en el que se estudian cuatro titulaciones de grado, y a primeros del siglo XX el municipio llegó a tener su propia caja de ahorros, que luego sería el germen de Caja de Extremadura (actual Liberbank).